Las autoridades suizas arrestaron el 27 de mayo en Zúrich a varios altos cargos de la FIFA bajo cargos de corrupción. Entre los delitos de los que se les acusa figuran fraude, blanqueo de dinero y extorsión. Según los investigadores, los detenidos usaron sus cargos para pedir dinero a cambio de derechos comerciales solicitados por ejecutivos del mercado deportivo. El monto estimado de los sobornos supera los 10.000 millones de dólares en 19 años.