Tras su devastador paso por el Caribe, el huracán Matthew, el más poderoso registrado en el Atlántico desde 2007, ha tocado tierra en EE.UU. Ante su inminente llegada, en los estados de Florida, Georgia y Carolina del Sur se han ordenado evacuaciones masivas y declarado el estado de emergencia. El desastre natural ya se ha cobrado centenares de vidas y ha causado graves daños materiales en la región caribeña.