Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia —lideradas por Rodrigo Londoño Echeverri, alias 'Timochenko'— se servían del terrorismo, narcotráfico, secuestro y extorsión para llevar a cabo su actividad armada desde 1964.
Colombia, Chile, EE.UU., la Unión Europea y otros Estados calificaban el grupo de terrorista, mientras que Ecuador lo consideraba como 'grupo irregular' y Venezuela como 'grupo beligerante'. Entre los métodos de lucha de las FARC destacaban la guerra de guerrillas y el combate regular convencional.