El Estado Islámico ofreció entregar a EE.UU. el cuerpo del periodista James Foley, ejecutado el pasado agosto por el grupo islamista, a cambio de un millón de dólares.
También propusieron realizar las pruebas de ADN para demostrar que el cuerpo decapitado pertenecía realmente al periodista estadounidense asesinado, informa Buzzfeed.com.