La representante de la OSCE para asuntos de la libertad de los medios de comunicación, Dunia Miatovich, expresó sus condolencias a la familia y compañeros del periodista y llamó a los servicios especiales de Ucrania a investigar inmediatamente este crimen, informó la agencia TASS.
Su asesinato llega un día después de la muerte a tiros del político opositor ucraniano Oleg Kaláshnikov, también en Kiev.
Una de las hipótesis que se baraja sobre la causa del crimen es la postura política de Kaláshnikov, exlegislador del Partido de las Regiones, gobernante durante la presidencia de Víktor Yanukóvich.
El exdiputado de la Rada Suprema había recibido últimamente varias amenazas de muerte.
En particular, Kaláshnikov llamaba a celebrar el 70 aniversario de la victoria de la URSS sobre la Alemania nazi. Además, el político organizaba acciones de protesta contra el gobierno de Piotr Poroshenko.
En menos de un año han fallecido varios políticos del gobierno de Yanukóvich. Todas esas muertes se produjeron en circunstancias que las autoridades han descrito como "suicidios", aunque las investigaciones no hayan descartado otras posibilidades.