Según los testimonios, el objetivo del ataque realizado por la noche fueron dos casas en el pueblo de Duma, cerca de la ciudad de Nablus, ubicado al norte de Cisjordania. En las paredes del edificio atacado los agresores dejaron inscripciones en hebreo donde reivindican la venganza, informó la agencia Maan.
"Vimos a cuatro personas que huían del pueblo y se escondieron en un asentamiento judío cercano", dijo a la agencia uno de los lugareños, testigo de lo sucedido.
El representante oficial del Ejército israelí ha calificado el incendio de "acto barbárico de terrorismo", informa NBC News. "Este ataque contra los civiles no es nada menos que un acto barbárico de terrorismo", ha anunciado el teniente coronel Peter Lerner. "Una investigación exhaustiva está en marcha con el objetivo de encontrar a los terroristas y llevarlos ante la justicia", ha agregado.
Representantes de círculos judíos de extrema derecha con frecuencia organizan acciones violentas similares, prendiendo fuego o causando otros daños contra los objetivos musulmanes y cristianos en Israel, Jerusalén Este y Cisjordania. En ese sentido, atacan casas y propiedades de palestinos y árabes israelíes e incluso bases militares. Las autoridades israelíes los califican como "terroristas judíos" y están luchando contra ellos, según RIA Novosti.
La muerte del niño puede agravar las tensiones entre israelíes y palestinos en el momento en que el gobierno del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu persigue la política de expansión de los asentamientos en los territorios ocupados. Días atrás Netanyahu aprobó la construcción de 300 viviendas para colonos judíos en Ramala, Cisjordania.
El analista político Carlos Alberto Pereyra Mele cree que la trágica muerte del niño palestino pone de manifiesto el doble rasero sobre la cuestión de los Derechos Humanos. "Si algunas naciones son enemigas de EE.UU. o de la UE o del Estado Israel los Derechos Humanos son tratados de otra forma", afirma el experto. Sin embargo, según Pereyra Mele, cuando los crímenes son cometidos por personas que integran esta coalición o alianzas es evidente que existe "una especie de doble rasero".