La primera marcha fue convocada por el nacionalista partido Alternativa para Alemania, al que se unieron grupos de extrema derecha, para rechazar la política de acogida para los refugiados del Gobierno germano. Mientras que en otra parte de la ciudad una segunda marcha fue convocada por organizaciones que dan la bienvenida a los refugiados y por grupos antifascistas, informan medios locales.
Las manifestaciones contaron con gran resguardo policial y eran pacíficas, sin embargo, al culminar las concentraciones se registraron enfrentamientos entre nacionalistas y antifascistas. La Policía detuvo a varias personas. En medio de los enfrentamientos, los nacionalistas agredieron a un camarógrafo de la agencia internacional Ruptly, miembro del grupo RT, que cubría los incidentes.