El pasado 29 de diciembre, una cámara de vigilancia de la ciudad china de Wenzhou, captó la muerte de Wang, una joven de 28 años que cayó a un río por andar distraída mirando su teléfono celular.
Las autoridades, que localizaron sus restos a la mañana siguiente, han difundido estas impactantes imágenes para concienciar a la población sobre los peligros de caminar distraído por las calles, informa 'El Comercio', ya que la conducta de muchos es la de prestar más atención a su teléfono móvil que a lo que sucede a su alrededor.