El Ministerio Público de São Paulo ha pedido prisión preventiva para el expresidente Lula da Silva, informa 'Folha de São Paulo'. Los fiscales alegan que la prisión es necesaria para garantizar "el orden público, la instrucción de proceso y la aplicación de la ley penal".
Ayer, la Fiscalía denunció al político brasileño por "ocultación de patrimonio, blanqueo de dinero" relacionados con un tríplex en Guaruja. Lula, por su parte, niega los cargos en su contra y afirma que sufre una "persecución política" por parte del Ministerio Público. Según la prensa latinoamericana, en declaraciones a los senadores el exmandatario brasilseño ha indicado que la Fiscalía quiere encontrar indicios contra él y su familia a cualquier precio.
En el marco de la investigación sobre el caso Petrobras Lula da Silva ya fue interrogado la semana pasada. El expresidente, que dejó el cargo en 2011, niega las acusaciones de corrupción y asegura no temer a la justicia porque no le debe nada a nadie.
En 2015 una comisión parlamentaria exoneró a la presidenta brasileña Dilma Rousseff y a su predecesor de toda responsabilidad en el caso de corrupción de la petrolera.
Por su parte, el analista internacional Julio Gambina sostiene que dicha orden fue innecesaria y no descarta que estuviera revestida de cierto "teatro", dada la popularidad del exmandatario brasileño.