Según el artículo, desde hace algún tiempo, los pasajeros del metro de Viena hacen lo que quieren sin ningún tipo de limitación: una pareja mantuvo relaciones sexuales dentro de un vagón y un pasajero subió al tren con su caballo, mientras que se han registrado numerosos casos de viajeros desnudos.
Para no privar a las parejas de poder mostrar su amor, las autoridades han creado una zona especial para besarse libremente.