El empleado canadiense de la ONU, que había sido secuestrado por un grupo radical en Siria en febrero pasado, ha sido liberado, según confirmó el portavoz de la ONU Martin Nesirky.
Carl Campeau, miembro de las Fuerzas de la ONU en los Altos del Golán (UNDOF), "está ahora con el personal de Naciones Unidas y en principio todo indica que se encuentra en buen estado de salud”, dijo Nesirky en una conferencia de prensa.