Tan solo cinco empresas tendrán autorización para cultivar la planta y distribuirla en el estado, en un máximo de 20 locales. La droga no podrá ser fumada y las dosis serán limitadas, mientras que el tratamiento no podrá superar los 30 días.
"El estado de Nueva York está orgulloso de haber estado en su historia a la vanguardia de muchos avances médicos", declaró el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, al sancionar la ley.