Hace unos 10 días unas 500 mujeres y niñas de la comunidad yazidí fueron secuestradas como 'botín de guerra' por milicianos del grupo radical iraquí Estado Islámico (EI), según han empezado a confirmar testigos y familiares.
Según el diario iraquí ‘Rudaw’, a las mujeres se las llevaron en camiones y al menos a dos de ellas, de más de 50 años, las asesinaron y arrojaron en la calle. Se teme que la mayoría de las mujeres ya hayan sido trasladadas a Siria, Mosul y Baaj.