Dos presos murieron decapitados y otros dos asesinados, uno de ellos al ser lanzado desde un tejado durante un motín iniciado este domingo en una cárcel de Cascavel, en el sur de Brasil, según informa AFP citando fuentes policiales.
Se sospecha que la revuelta comenzó cuando dos funcionarios de la prisión fueron tomados como rehenes durante unas reyertas por ajustes de cuentas entre las diferentes bandas criminales de la cárcel.
Al lugar acudieron efectivos de la Policía Militar, negociadores y familiares de los prisioneros. El motín parece seguir activo después de que se iniciase hace 12 horas. Los reclusos exigen mejores condiciones alimentarias.