La atrocidad y la enajenación que muestran los yihadistas del Estado Islámico podría tener una explicación química, ya que, según recoge la revista italiana 'L'Espresso', los milicianos combaten bajo los efectos de los alucinógenos.
"Antes de entrar en batalla" les suministran "píldoras alucinógenas para atacar a los enemigos sin miedo: Baltan, Capticol, Zolam, Briximol y también hachís", declaró a la revista uno de cinco terroristas del Estado Islámico apresados por las fuerzas kurdas en el norte de Siria.
Otro de los yihadistas también reconoció que muchos de los terroristas que se unen a sus filas lo hacen por el dinero que perciben por combatir.