Según Lébedev, empresas de la capital británica ayudan a funcionarios corruptos y criminales de todo el mundo a ocultar miles de millones de dólares robados. Según el empresario, desde el año 2000 cerca de un billón de dólares fue robado de Rusia y casi cuatro billones de dólares de China.
El multimillonario ruso declara que la ciudad de Londres se ha convertido en el centro de la oligarquía financiera mundial.