A diferencia de hace unos siglos, cuando los españoles se lanzaron a la conquista de América, en la España de principios del siglo XXI sus ciudadanos ya no quieren luchar ni para defender su país, informa 'El Mundo' citando los resultados de una encuesta.
Según el sondeo, un 55,3% de los españoles rechazaría o se mostraría reacio a tomar parte en la defensa de España si fuera atacada por otro país, mientras que solo un 16,3% se inclinaría por hacerlo sin dudarlo y otro 22,4% sería más bien proclive a participar. No obstante, estos dos últimos porcentajes bajan de año a año.
Además, en varias comunidades autónomas hay también un retroceso del sentimiento de la pertenencia a España, y la españolidad se profesa con más fuerza en Melilla y Ceuta, donde la mitad de la población es musulmana.
La mayoría de los ciudadanos encuestados consideran que tienen una doble identidad, la española y la de su comunidad autónoma, identificándose más con la segunda.