"Era tan natural estar en una habitación con un dragón volando. No podía dejar de sonreír con tales impresiones", explica Thomas Tull, productor de cine que tuvo suerte de probar el prototipo de las gafas.Google’s buying a virtual reality company that can do this, which I NEED right now: http://t.co/PRnic5T6wW pic.twitter.com/M0oTNeYxcJ
— Downtown Josh Brown (@ReformedBroker) octubre 14, 2014