El neurobiólogo británico Geoffrey Raisman ha conseguido que un paciente con parálisis por daños en la médula espinal pueda volver a caminar con ayuda de un andador, informa ‘The Guardian’. Su tratamiento se basó en el uso de unas células del bulbo olfativo del paciente que tienen poder regenerador para reparar los nervios afectados.
"Hay aún un largo trayecto por delante y años de experimentaciones, cinco en el mejor de los casos", advirtió el médico, que pidió a las familias de los pacientes tener "paciencia y esperanza".