El pontífice envió un mensaje a Francesco Bamonte, presidente de la organización, cuyos integrantes celebraron su primer congreso tras la aprobación pontificia de la Congregación para el Clero en junio pasado.
Francisco pidió a los exorcistas que, "en el particular ministerio ejercitado" y "en comunión con los propios obispos", manifiesten "el amor y la acogida de la Iglesia hacia quienes sufren a causa de las acciones del maligno".