El último fugitivo de la secta Aum Shinrikyo ha sido detenido en la capital nipona, 17 años después del ataque mortal con gas sarín en el metro de Tokio.
Katsuya Takahashi, de 54 años, fue arrestado en una café en el centro de Tokio tras ser reconocido por un empleado, quien llamó a la Policía.
El detenido ya se ha declarado culpable, según informó la televisión pública NHK.
El arresto se produjo tan solo 11 días después de que fuera detenida una ex líder de la secta, Naoko Kikuchi.
El ataque perpetrado en 1995 dejó 13 personas muertas y centenares de intoxicados. Casi 200 integrantes de la secta recibieron condenas por ese y otros crímenes. El líder, Shoko Asahara, está en la cárcel esperando su ejecución, junto con otros dirigentes de esa organización extremista.