El sumergible chino ‘Jiaolong’ se sumergió con éxito a una profundidad de 7000 metros en el Océano Pacífico. Las pruebas se realizan en la Fosa de las Marianas.
Este logro permitirá al batiscafo llevar a cabo trabajos de investigación en el 99% del fondo del océano. Los científicos mejoraron el sistema de presión hidráulica para que pueda sopotar la alta presión y las bajas temperaturas a esas profundidades.
China se ha convertido en el quinto país del mundo después de EE. UU., Francia, Rusia y Japón, que cuenta con tecnología capaces de sumergirse a más de 3.500 metros.