Se trata del primer envío marítimo de EE.UU. a la isla en los últimos 50 años, y con él se inaugura un servicio de viajes regulares de barcos que transportarán artículos considerados por EE.UU. como ‘ayuda humanitaria’.
La mayor parte de los materiales se enviaron desde el barrio La Pequeña Habana de Miami y de la localidad de Hialeah, que tienen gran población cubana.
En su primer viaje a Cuba, el barco lleva un solo contenedor y entró a puerto con bandera cubana y de Bolivia.