Los especialistas del principal hospital psiquiátrico de Noruega, Dikemark, pueden negar el tratamiento obligatorio al terrorista Anders Behring Breivik, aunque el Tribunal decida que debe recibirlo.
El próximo 24 de agosto se anunciará la sentencia para el ultraderechista que en el verano de 2011 asesinó a 77 personas en un doble atentado. Breivik puede ser condenado a 21 años de cárcel o tratamiento psiquiátrico obligatorio.
Sin embargo, los especialistas del hospital Dikemark ya habían concluido en invierno pasado que Breivik no padece alteraciones mentales graves. Si el tribunal sentencia que debe recibir tratamiento, se realizará un nuevo análisis. “No podemos empezar el tratamiento solo porque así lo ha decidido un tribunal. Solo nosotros podemos hacer el diagnóstico y determinar la terapia”, dijo la representante del hospital, Anne Kristine Bergem, a los medios noruegos.