Arturas Zuokas, alcalde de Vilna, la capital de Lituania, ha echado el ojo a una isla griega, aún sin identificar, informa el portal de internet Delfi. Según el funcionario, el precio de la isla era antes de unos 5,7 millones de dólares y ha disminuido recientemente.
Zuokas no propone comprarla con dinero del presupuesto de la capital lituana, sino que sugiere su adquisión por “empresarios lituanos para que la regalen a la capital o al Estado". El alcalde cree que podría ser utilizada como atracción turística y centro de negocios. La iniciativa se debe a que las deudas de Vilna rozan ya los 360 millones de dólares.
El Gobierno griego ha declarado su disposición a vender o arrendar las islas deshabitadas como una forma de recaudar fondos para luchar contra la crisis.