"Tenemos supuestos y tenemos algo de información, y toda la información que tenemos ahora conduce a la misma dirección sobre los autores, los criminales", aseguró el presidente libio, Mohamed el Magariaf, en una entrevista con la cadena NBC.
Los ataques en la oficina consular de Bengasi se produjeron el martes coincidiendo con las manifestaciones de protesta que estallaron en Egipto contra un vídeo que los musulmanes consideran blasfemo, y que supuso el comienzo de una ola de indignación que se han ido extendiendo por países árabes de varios continentes.