Al menos 132 presos escaparon de una cárcel en Piedras Negras, una ciudad limítrofe del noreste de México. Abandonaron la penitenciaría a través de un túnel de más de 30 metros de largo y tres metros de profundidad que los acercó a la frontera con EE.UU.
Las autoridades del estado de Coahuila ya han presentado cargos contra 41 vigilantes que presuntamente ayudaron a los reos en la huida. El director y dos otros empleados de la penitenciaría han sido detenidos hasta que se termine la investigación, según informó el procurador general del estado, Homero Ramos Gloria.