Las autoridades mexicanas condenaron "enérgicamente" el homicidio de un adolescente cometido por agentes estadounidenses en la frontera entre Sonora, México, y Arizona, EE.UU.
El joven murió después de que agentes estadounidenses de la Patrulla Fronteriza dispararan con armas de fuego.
La Cancillería mexicana subrayó que su Consulado en Arizona solicitó de inmediato a las autoridades de EE.UU. una investigación "exhaustiva, oportuna y transparente que sea llevada hasta sus últimas consecuencias y derive en todas las sanciones que correspondan".