El presidente sirio, Bashar al Assad ha decretado una amnistía general para todos los presos encarcelados por delitos cometidos hasta hoy, 23 de octubre. La medida, no obstante, excluye a los terroristas y a criminales prófugos, aunque estos últimos pueden ser amnistiados si se entregan en un plazo determinado.
Con el nombre "terroristas" el presidente designa también a los rebeldes que llevan más de un año luchando contra el régimen.