Ya son 24 los fallecidos por la meningitis fúngica en EE.UU., mientras que en total 312 personas han resultado infectadas por el virus, informa Reuters.
Las autoridades sanitarias estadounidenses relacionan el origen del brote con unos lotes contaminados de inyecciones de esteroides fabricados y distribuidos por el centro farmacéutico New England Compounding Center (NECC). Más de 14.000 personas podrían haber recibido dosis de los medicamentos contaminados.
El registro efectuado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) en la sede de NECC en Boston confirmó que infringía varias normas sanitarias.