Los delegados de los diálogos climáticos de la ONU en Qatar han acordado extender el Protocolo de Kioto hasta 2020, evitando un nuevo revés importante.
El acuerdo, que expiraba el 31 de diciembre, ha sido aprobado casi por 200 naciones, lo que significa que este protocolo sigue siendo el único plan jurídicamente vinculante para combatir el calentamiento global.
Rusia se ha opuesto a apoyar el documento internacional.