El Departamento de Estado de EE.UU. pide al Congreso que aumente la financiación para la protección y seguridad de las misiones diplomáticas hasta los 1.419 millones de dólares.
Esta decisión fue la respuesta de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, al informe de la comisión de investigación sobre las condiciones del ataque contra el consulado en Bengasi el 11 de septiembre, que le costó la vida al embajador norteamericano Chris Stevens y a tres funcionarios de la misión.
Se crearán cinco grupos interdepartamentales para evaluar los riesgos para los diplomáticos estadounidenses en Afganistán, Azerbaiyán, Egipto, Indonesia, Iraq, Jordania, Kenia, Libia, Mauritania, Nigeria, Pakistán, Sudán del Sur, Somalia, Siria, Túnez y Yemen.