Los republicanos han reconocido este jueves que no tienen apoyo suficiente para aprobar su proyecto de ley tributario, diseñado para descartar los recortes planeados para el presupuesto militar del país, ampliar los recortes en programas sociales y elevar los impuestos para las personas que ganen más de 1 millón de dólares anuales. Han cancelado la votación al respecto en la Cámara de Representantes del Congreso.
Ahora será responsabilidad del Senado y del presidente Barack Obama diseñar una legislación que permita evitar el llamado precipicio fiscal.
La falta de acuerdos entre demócratas y republicanos aumenta el riesgo de que a partir del 1 de enero de 2013 el país caiga en el temido precipicio fiscal: en los primeros días de 2013, el déficit estatal de EE.UU. se reducirá en un 50%, debido a un aumento de los impuestos y los recortes de gastos estipulados por una serie de leyes que entrarán en vigor automáticamente, si para ese momento el Gobierno no logra llegar a un compromiso y elaborar una nueva legislación financiera. Según pronostican los expertos, un cambio tan drástico (conocido como abismo o precipicio fiscal desembocará en una nueva recesión.