Un desconocido irrumpió en la oficina de Deutsche Bank en un barrio periférico de Berlín este viernes, poco antes del cierre de la sucursal. El asaltante anunció que llevaba en su bolsa una bomba y tomó de rehén a un empleado del banco, mientras otros 20 empleados lograron escapar por la puerta trasera.
Un fuerte contingente policial integrado por unos 300 agentes acordonó desde la tarde del viernes un amplio radio alrededor de la filial de la sucursal.