Su abogado indicó que su cliente seguirá estando bajo control judicial, dado que le atribuyen la pertenencia a un grupo terrorista.
Harzi fue detenido en Turquía y extraditado en octubre a Túnez, bajo la sospecha de haber participado en el ataque en Bengasi. Tres investigadores del FBI le interrogaron en relación con el atentado en presencia de un juez tunecino que presidió el caso. No se permitió que sus defensores asistieran al interrogatorio.