El presidente de Pakistán, Asif Ali Zardari, y su homólogo iraní, Mahmoud Ahmadinejad, inaugurarán un gasoducto que unirá a los dos países.
El gasoducto, de 780 kilómetros, será construido en los próximos dos años con el objetivo de que Irán pueda dar salida a su gas. Pakistán lo ve como una manera de aliviar la escasez de energía del país. Mientras tanto, EE.UU. se opone abiertamente al proyecto, ya que teme que pueda socavar los esfuerzos de presión sobre Teherán en represalia por sus actividades nucleares.