Las autoridades del estado estadounidense de Texas no presentarán cargos contra Alan y Laura Shatto por la muerte de su niño adoptado ruso de 3 años de edad Maxim Kuzmin.
El pasado 1 de marzo anunciaron también que, según un examen médico, su muerte no fue causada por la violencia doméstica. No obstante, Rusia recibió con desconfianza la versión oficial sobre las causas de la muerte del niño exigiendo una investigación más profunda y transparente del caso.
La muerte de Maxim, que falleció el 21 de enero tras ser ingresado en un hospital, se dio a conocer a mediados de febrero. Según su madre adoptiva, Laura Shatto, el menor se desmayó mientras jugaba con su hermano cerca de su casa.
La muerte del menor volvió a poner sobre la mesa el problema de los niños rusos adoptados por estadounidenses y tuvo gran repercusión en la sociedad rusa.