Nawaz Sharif, el primer ministro de Pakistán elegido por el pueblo por tercera vez, llamó a los talibanes a conversaciones de paz con el Gobierno. El político del partido Liga Musulmana-N, dijo que la práctica de derrocar a gobiernos elegidos a través de la violencia debe detenerse de inmediato.
El 11 de mayo el partido de Sharif obtuvo una victoria ajustada. La jornada electoral, así como la campaña electoral previa, fueron más sangrientas, cobrándose la vida de centenares de personas. La violencia fue perpetrada por talibanes paquistaníes contra los políticos.