El sargento del Ejército de EE.UU. Robert Bales se ha declarado culpable de la masacre que tuvo lugar el 11 de marzo de 2012 en la provincia afgana de Kandahar y dejó 16 víctimas mortales y 6 heridos.
A finales de mayo de 2013 se dio a conocer que las autoridades militares de EE.UU. habían instado a Robert Bales a aceptar su culpa y a llegar a un acuerdo judicial para evitar la pena capital.