El mismo día que se cumple un año de su destitución el ex presidente paraguayo Fernando Lugo calificó aquellos acontecimientos de "un golpe de Estado" que –dijo- permitió "el reposicionamiento de la clase oligárquica privilegiada históricamente" en Paraguay.
La víspera del aniversario de la destitución de Lugo miles de personas salieron a las calles de diferentes ciudades para denunciar la corrupción y arremeter contra la clase política.