Durante su intervención en la conferencia de Munich, el presidente ucraniano, Piotr Poroshenko, alegaba que su país “tiene derecho” a recibir armamento para combatir a los milicianos en Donbáss. Mientras que Francia y Alemania ven la iniciativa de envió de armas con escepticismo, al otro lado del Atlantico cada vez son más las voces de apoyo por parte de altos funcionarios.