En EE.UU. tener una brillante carrera diplomática también se compra con dinero

Para muchos la carrera diplomática representa un símbolo de prestigio y éxito en la vida y también requiere mucho esfuerzo, sacrificio y aprendizaje. Sin embargo, parece que en EE.UU. un puesto de embajador se otorga debido, entre otras cosas, a la capacidad de recaudar fondos para el presidente.

El embajador estadounidense en la Republica Checa, Andrew Schapiro, solo necesitó cinco meses en su puesto para que le cerraran las puertas del palacio presidencial de ese país.

Antes de su designación, el embajador Shapiro nunca había desempeñado ningún puesto diplomático, pero hay reportes que indican que recaudó más de un millón de dólares para la campaña electoral de Barack Obama.