Una caravana de indígenas norteamericanos de las tribus apaches llegó hasta el Capitolio reclamando el respeto por sus tierras. Decenas de personas protestan contra una explotación de cobre por parte de una corporación minera en territorios que consideran sagrados.
Con ritmos nacionales y pancartas aseguran que estas actividades amenazan con la devastación de la Tierra. Para realizar este acto de rechazo, los manifestantes, que salieron del estado de Arizona el pasado 5 de julio, tuvieron que recorrer más de 2.000 kilómetros.