Centenares de personas, entre ellos parientes y militares, se congregaron para despedirse de él. Recibió sepultura como un héroe, con una orquesta militar, guardia de honor y salvas. El infante, de 29 años, estaba casado y tenía una hija. Ha sido condecorado con el orden a la valentía a título póstumo, por decreto del presidente Putin.