Miles de personas permanecen atrapadas en la frontera entre los dos países y su número puede aumentar hasta 70.000 el mes que viene, según ha advertido el ministro griego de Política Migratoria. Mientras tanto, países como Macedonia, Serbia, Eslovenia y Croacia anunciaron una cantidad diaria de refugiados a los que dejarían pasar.
En este contexto, el politólogo Rubén Corral considera que los autores de los sistemas de control fronterizo solo tienen en cuenta "cuestiones de política interior y de seguridad y no la situación de la personas que huyeron de guerra".