El presidente cesado de la Generalitat y diputado del partido Junts per Cataluña, se encuentra en Bélgica. Tras las elecciones del pasado 21 de diciembre, donde los secesionistas obtuvieron mayoría de escaños, se mantiene la incógnita sobre el siguiente paso de Puigdemont. Para ser investido tendrá que regresar a España, pero en tal caso pesa sobre él una amenaza de detención.