Apuntan a un juego sexual como causa de la muerte de un empresario ruso en Londres

El caso Skripal no es el único que tiene de una u otra forma una vinculación con Rusia. Las autoridades británicas investigan también lo ocurrido a Nikolai Glushkov, un exsocio del magnate ruso Borís Berezovski que fue declarado culpable en Rusia por defraudación en la compañía aérea Aeroflot. Mientras su muerte provocó insinuaciones sobre una posible "mano rusa", el rotativo británico The Daily Mail atribuye ahora la causa a un arriesgado juego sexual.