Los acusados fueron sentenciados a 9 años de prisión y 5 de libertad condicional, generando una gran ola de manifestaciones por toda España.
La protesta apunta a que los hombres fueron autores de una violación en grupo y no de abuso sexual, como determinó el Tribunal de Navarra, evitando así una pena de más de 22 años de cárcel.
La víctima de 18 años denunció una agresión sexual en un portal durante las fiestas de Sanfermines de 2016.