Nueva polémica en torno a la pena de muerte en EE.UU.

Cada vez se registran más casos de ejecuciones fallidas en las que los condenados a muerte pierden la vida después de más de 20 minutos de angustia. Esto puede deberse a que los medicamentos para las ejecuciones son administrados por funcionarios de prisiones y no por personal médico. La larga y dolorosa agonía por el fracaso de la inyección letal es una de las razones que llevan a algunos grupos a protestar por este tipo de penas.