Amor a primera vista: cuando una gaviota se posa sobre tu cabeza y no quiere irse

Una atrevida gaviota se posó sobre la cabeza de un pescador cerca de las costas noruegas y se negó a irse hiciera lo que hiciera el hombre. Parece que una cabeza humana tocada con una gorra es un lugar muy cómodo para las aves marinas.